El entrenamiento emocional es una asignatura bastante olvidada por muchos y dominada por unos pocos. El objetivo de este tipo de entrenamiento es el dotar a las personas de las herramientas para vivir de una manera más satisfactoria y rica, poder disfrutar de las emociones positivas y agradables sin dejarse dominar por las emociones negativas y desagradables.
Se trata de aprender a ofrecer y recibir afecto, opinar, aceptar críticas de una manera correcta, defender nuestros derechos como seres humanos y respetar los de los demás, dejar de ser prisioneros del pasado o esclavos del futuro, centrarse en el presente con sus dificultades y recompensas sin someterse a exigencias auto impuestas que solo causan frustración, malestar y dolor.
Para conseguir estos objetivos empleamos los valiosos recursos de la terapia psicológica basada en evidencias científicas, concretamente la psicoterapia cognitivo conductual.
El enfoque cognitivo conductual se ha empleado con gran éxito en el tratamiento de problemas tan variados como son la depresión, el trastorno por pánico y agorafobia, la ansiedad generalizada, la fobia social, el abuso de substancias, los problemas de pareja, entre otros. Debido al los resultados tan positivos obtenidos por un gran número de investigaciones a lo largo de cuarenta años, hoy en día la terapia cognitivo conductual es el referente en la mayor parte de las universidades y los servicios de salud del mundo.